Con un maquillaje aplicado correctamente podemos obrar milagros para corregir aquellas zonas de nuestro rostro que más nos desagradan. La clave está en saber qué productos elegir y cómo utilizarlos. Tener una boca pequeña es un problema muy común entre las chicas, pero por suerte los grandes maquilladores nos han dado los pasos a seguir para poder conseguir una boca más grande ópticamente. ¡Atenta!
PASO 1
Antes de empezar a pintar tus labios, es esencial que redibujes el contorno de tus labios aplicándote un poco de corrector. Para conseguir nuestro objetivo, no olvides difuminar bien el producto para lograr un efecto de “labios borrados”.
Para empezar a agrandar tu boca, utiliza un lápiz de color tostado para perfilar los labios por fuera de su contorno. ¡Importante!: trata de igualar el tamaño de ambos labios, porque un error bastante común es tender a dejar el labio superior más grande que el inferior. Si haces esto, tu boca parecerá menos natural.
PASO 3
Llega el momento de rellenar tus labios. Para ello, aplícate la barra de color elegida con la ayuda de un pincel fino. Para lograr una boca más sonriente, aplica el producto desde el centro hasta las comisuras, pero deja sin pintar la parte central.
La elección del color es un factor muy importante para conseguir unos labios más voluminosos. Alíate con la paleta de los rosas, rojos y tostados.
PASO 4
En la parte central que has dejado sin rellenar, aplica un poco de gloss. De este modo, conseguirás dar luz a tu boca. Ten en cuenta que si aplicas el gloss en el exterior de la boca, con el paso del tiempo tenderá a moverse, extendiéndose por las líneas de expresión.
Un truco profesional es utilizar un bastoncillo empapado en base de maquillaje para repasar las comisuras de los labios.
BOCA GRANDE
Si, por el contrario, tus labios son más grandes y lo que quieres el lograr una boca ópticamente más pequeña también te desvelamos los pasos a seguir:
Aplícate un poco de corrector por toda la boca y perfila tus labios pero sólo por dentro de sus contorno. Recuerda que no debes marcar las comisuras. A la hora de elegir el color, debes apostar por tonos más oscuros, como el color vino o burdeos.
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