Tener la piel grasa no implica que todo sea malo. ¡Al contrario! Este tipo de piel tiene muchas ventajas, como que tiende a envejecer mejor y a tener menos arrugas.
Pero lidiar con la piel grasa que requiere de ciertos cuidados, te mostraré a continuación algunos trucos de belleza que te pueden ayudar a tener el rostro lindo y saludable.
Primero que nada debes limpiar bien y a diario tu rostro. Cuando más aceitosa sea tu piel, más sucia se verá y se sentirá, por lo que tienes que lavarla dos veces por día: a la mañana y a la noche.
Algunos recomiendan el jabón normal de uso diario, otros loción limpiadora o ponerle un poco de loción al jabón diario. También otra alternativa y la más ideal si sufres de piel sensible o alergias es el jabón de glicerina.
El aloe vera en gel absorberá y limpiará tus poros. Úsalo dos o tres veces al día, sobre todo después de lavar tu rostro. Mantén el gel en el refrigerador para una sensación fría y refrescante.
Para la piel muy aceitosa, las cremas humectantes no son necesarias; la piel ya hace su trabajo para evitar la resequedad. Así que no necesitas usarlas.
Usar exfoliantes o máscaras luego de la limpieza de cutis ayuda a remover el exceso de aceite de la superficie, a quitar células muertas y dejar la piel profundamente limpia y suave.
Aplícalas una o dos veces por su semana: no se recomienda aplicar todos los días.
Con uno de los ingredientes más típicos de la cocina, el huevo, puedes hacerte una rápida máscara que te ayude a sacar el brillo aceitoso de tu rostro.
Una mascarilla de yema actúa secando la piel y eliminando su sensación grasosa. Déjala actuar por unos quince minutos y luego enjuaga con agua fría.
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